Una vez que sufrís una pérdida en este plano físico se comienzan a establecer diálogos con esa persona que ya no ves, como si estuviesen todo el tiempo con uno.
Durante el proceso del duelo comienzan a aparecer diferentes tipos de diálogos internos y que detallo a continuación
Diálogos espontáneos que surgen de la nada y que uno mira al cielo y comienza a preguntar “che tírame un centro y que hago con esto” o “Vos harías tal o tal cosa” o te enteras algo de alguna persona y le cuentas como se lo hubiese contado.
Diálogos anecdóticos, cuando le decís te acuerdas cuando paso esto o lo otro, “Uy, te acuerdas cuando vinimos a este restaurante o que paso tal cosa”
Diálogos de reclamo, este tipo de diálogo se da instantáneamente post pérdida, uno le dice porque te fuiste tan pronto, por qué me dejaste este quilombo y comienzas a reclamarle lo que consideras malo en ese momento.
Diálogos en los momentos especiales, este tipo de dialogo se da en fechas claves en los que traemos a colación lo grande que están los hijos o de ciertas tareas que se asignan en esas fechas.
Diálogos en el auto, es increíble como uno establece esos diálogos, especialmente cuando vamos solos y le hablas para contarle lo del día. Me ha pasado de ir manejando y me mando alguna y automáticamente es como si lo mirara y me rio sola.
Diálogos antes de ir a dormir, estos son muy comunes, es el momento en el que uno se relaja, muchas veces es el momento de uno, en el que está solo y que las palabras salen.
Diálogos cuando se vuelven los asistentes de uno en el cielo y les pedimos que nos ayuden a encontrar cosas o a resolver situaciones. Me ha pasado de buscar algún papel importante o una zapatilla que no encontraba y que una de mis hijas la necesitaba para irse a colegio y le pedía que me ayudara a encontrarla.
Estos diálogos internos que se dan como si estuviesen en este plano nos da la pauta que siempre nos están acompañando y que siguen vivos en nosotros.